La visión es el sentido que menos desarrollado tiene el recién nacido, en sus primeras semanas de vida.
Durante el crecimiento, la visión va evolucionando hasta llegar a la madurez del sistema visual, que se produce entorno a los 12 años.
Los problemas que pueden aparecer en la infancia pueden ser refractivos (miopía, hipermetropía y astigmatismos), ambliopía, estrabismos, entre otros.